Primero que nada quiero pedirte una amplia disculpa por el evidente descuido que he tenido con el blog. Estas últimas semanas realmente han sido difíciles y a la vez de crecimiento personal, emocional y ¿Por que no? espiritual. En las que de alguna manera me aleje de muchas personas importantes (claro los incluyo a ustedes mis amadisímos lectores por qué son MUY IMPORTANTES para esta humilde escritora que apenas comienza :3).
En está etapa tan maravillosa de mi vida, que de verdad agradezco, hubo algo que realmente me ayudó, ese "algo" qué solo el anime y un profesor que tuve el honor de tener en 6to. año de primaria han podido enseñarme y esto es... "rompe las expectativas". Esta enseñanza me ha ayudado mucho a lo largo de mi vida. Y es que ¿qué anime no te muestra este valioso ejemplo?
Para muestra un botón:
¿Qué era lo que la gran mayoría pensaba de Naruto? (claro, exceptuando que Kurama tomará el control de Naruto y terminará destruyendo la aldea entera)
¿Qué pensaba Tsugumi de sí misma cuando llego a Shibusen? (para quienes no sepan, hablo de Soul Eater Not!. Me reservo la opinión que tengo de este anime xD)
¿Qué pensaban todos los demonios y humanos Inu-Yasha cuándo veían su condición híbrida?
¿Qué pensaba Kenichi de sí mismo cuando llego a ryozanpaku?
Nadie esperaba nada de Naruto. Todos pensaban que Inu-Yasha era un ser de lo peor por su origen híbrido. Y por último y más importante ni Kenichi ni Tsugumi tenían verdadera fe en sí mismos: ambos se consideraban débiles y no se creían capaces de nada. Sin embargo, a lo largo de cada anime todos y cada uno rompieron la idea que todos e incluso ellos mismos tenían de su persona.
Está lección es importante para mí por qué nunca se sabe que sorpresas te puedes llevar al romper los límites autoimpuestos. Creo que si puedes lograr algo, siempre puedes lograr más. Llevo conmigo esa lección tan maravillosa que me ha dejado mi profesor de 6to. y todos esos personajes tan entrañables de anime. Sé que es increíblemente difícil ponerlo en práctica y llevarlo a la realidad... pero también es otra cosa que te muestra el anime. Nunca leerás un manga o verás un anime en el que el protagonista la tenga fácil, en la gran mayoría verás al protagonista trabajar duro, esforzándose, a veces lo verás desesperarse e incluso llorando pero siempre estará enfocado en lo que quiere, ya sea aprender una técnica legendaria, demostrar algo, conseguir su libertad o cambiar su mundo. Incluso si al principio no creía en si mismo o si nadie creía en él o ella, esté siempre romperá esa expectativa, ese límite que tiene frente de sí. Creo que lección bien aplicada
puede crear grandes cambios en alguien de la vida real.
Es cierto que la vida no es un anime, pero si podemos ser los protagonistas de nuestra propia historia...
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